domingo, 27 de marzo de 2011

Dia del padre y manchas solares

Ciertamente el pasado fin de semana ha sido todo un regalito. Un solazo que daba gusto estar por ahí. Coincidiendo con el día del Padre, la celebración del suegro nos llevó al Heron City de la Rozas. Lo dicho: solazo. Estuvimos un ratillo en la terraza, haciendo tiempo hasta la hora de comer con una cervecita y acabe colorao. Es más, hace no mucho me fui a ver una mancha que me había salido en la frente, no fuera a ser algo raro. Sólo era pigmentación y me dijo el doctor (un tipo muy parecido al bajito de Faemino y Cansado) que eso me lo quitaba en un plis. Dije que OK y me pegó casi a traición una rociada de nitrógeno líquido que me estuvo picando toda una tarde. Luego se transformó en ampolla y después en costra, en unos días. Apenas quedo una mínima marca al caerse, ni se notaba. Qué control, qué bien!!!…Pues nada, una mañana en una terracita y la pigmentación ha vuelto a aparecer. Quémese usted con nitrógeno para nada…La mancha, en el círculo rojo...



A lo que iba, mucho calor y tal, así que de ir a comer en terracita pasamos a comer en la sala del restaurante Imanol. Es el típico sitio con una buena barra de pinchos a la entrada. De esos pinchos que dan ganas de comerte uno de cada, muy vistosos y seguro que sabrosos. Pues no los pudimos catar. Preguntamos si, aparte de lo que fuéramos a pedir nos podíamos llevar unos pinchos a la mesa y nos dijeron que no, además un poco secos…En fin…hubiéramos pedido lo mismo más los pinchos, así que eso que se perdieron.
Sacamos para compartir unos corazones de alcachofa fritos, ración muy rica, con las alcachofas reducidas a su tierno centro, pero con algunas zonas churruscaditas y crujientes. Muy buenas.



Buenos unos callos a la madrileña, bien melosos, aunque quizás faltos de un punch de picante.



Las croquetas de jamón prometían, pero no me gustaron demasiado, la textura no me convenció y venían algo frías.
De segundos un par de raciones de huevos estrellados con jamón. De nuevo gesto un poco feo después de negarnos los pinchos. Pedimos si podían cambiar el jamón por chistorra (así, por precio, para mí que les interesaba, que digo yo que es más caro el jamón). Pues no, nos dijeron que nos pidiéramos aparte una ración de chistorra. Tampoco hubo mayor problema, nos comimos jamones y chistorras, pero el gesto ahí queda.



Una ración de rabo de toro muy sabrosa, de esas que casi no hay ni que cortar de tierna que esta, muy bien.



También hubo una lubina interesante de la que no hay foto. Y para compartir, también chuletón de buey al peso…Estaba rico, si, pero venía con bastante grasa. Vale que te cobren el hueso al pesarlo, tradición que tampoco acabo de entender, pero por lo menos límpiame la grasa un poco.Detalles…



El postre ya estaba previsto en otro lugar, pero nos tomamos allí el cafetito y unos chupitos de pacharán correctos. La cosa, con una botella de Izadi Crianza se fue al entorno de los 30 euros por persona, teniendo en cuenta que la carne la compartimos entre tres y el pescado entre dos.Carillo por detalles...

1 comentario:

  1. Pachi, estoy contigo la comida de Imanol estuvo muy rica, pero el trato fue regulero y, al final, vale tanto una cosa como la otra.

    De todas formas pase un rato estupendo con todos vosotros así que me quedo con eso y no con las borderías de un camarero mosqueado por tener que trabajar un domingo!

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